¿MENÚS BUENOS Y BARATOS? "DONDE SIEMPRE" (Autol, La Rioja)
Cansado de hablar todas las semanas del monotema político (una amnistía que todavía no ha entrado en vigor, señores fachas de la derechona) y del continuo adoctrinamiento derechil de Vicentín (lo último ha sido criticar el excelente discurso del portavoz socialista Patxi López durante el pleno de investidura de Pedro Sánchez en el que Patxi solo dijo verdades como puños), es mi intención parar unas semanas y hablar de otros temas aunque intrascendentes pueden ayudar a calmar el ambiente excesivamente crispado de nuestro país por culpa, entre otros de VOX, el PP y la derecha mediática para la que trabaja nuestro enemigo Vicentín. Uno de esos temas intrascendentes es el gastronómico. Para ello he de hablar de un restaurante poco conocido en regiones que no sean La Rioja. Me estoy refiriendo al Restaurante Donde Siempre situado en la calle Coronel Lasanta 8 de Autol.
El menú es variado y económico. Si se pide el del día, hay varios primeros, segundos y postres a elegir. Lo que sugiere el que suscribe es elegir un primero que no llene mucho. Olviden, así las pochas y similares. Los segundos platos son contundentes sobre todo en lo relativo a la carne a la brasa. Disponen en este sentido de lagarto, pluma, etc de cerdo. Se sirven grandes raciones acompañadas de muchas patatas fritas. Si aún se han quedado con hambre, cosa que dudo, los postres también son, como diría Joaquín Sánchez, de categoría. Aconsejo que se pida, por ejemplo, una tarta de queso que aquí las hacen excelentes. Hay una pega, eso sí. ¡No todo iba a ser perfecto!. Aviso que no se tome café ya que la cantidad que se sirve es muy poca y en unos vasos de juguete. Si quieren pedir cafe, tómenlo con leche; la ración es más generosa.
El autor de estas lineas está acostumbrado a comerse todo lo que me sirven ya sea en el primer y segundo platos y postre. Pero como creo que ustedes no son como yo, no pasa nada porque se quede algo en el plato. Los encargados de "Donde Siempre" les ponen los restos en táper al módico precio, eso sí, de un euro. Como dice un anuncio, "la comida no se tira".
En definitiva, si quieren comer bien y barato, lo tienen fácil. Solo tienen que preguntar "¿Dónde hemos quedado?". La respuesta se intuye: "DONDE SIEMPRE". No se arrepentirán.
Hecha esta reseña, solo me queda despedirme con mi consabido grito de guerra:
¡HASTA LA SEMANA QUE VIENE, CRÁPULAS!.
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